-I-
Furúnculo libertario perdona que yo te nombre, que ignore tu anonimato, que no practique recato y me muestre solidario. Sé que no eres fiestero, que no te gusta el jolgorio y si se trata de recetas, lo tuyo es supositorio. Eres de pocas palabras, tu accionar es lapidario. no te convencen brebajes ni ungüentos de boticario.
-II-
Pero, Furúnculo Libertario, ¿Cómo no rendirte loas?, ¿cómo no admirar tu destreza, si le diste en la cabeza al gobierno estrafalario? ¿Cómo no sentirse agradecido por la paz que nos regresas, si dispones del mal hablado, lo silencias con justeza, lo dejas embalsamado, sin pedirnos nada a cambio, ni una rueda de prensa. Contigo no valen poses La humildad está contigo, cuán enorme es tu grandeza.
-III-
Furúnculo Libertario, te reitero mi devoción, pues no requieres marchas, ni voladuras de avión, no consultas a la OEA ¿Para qué más reunión? A cualquiera tú despachas. Con una simple torsión te concentras en el trasero y vas directo a la acción, que lo traigan con su manguera o si prefiere un cajón, a ver si nos ponemos serios y aprendemos la lección.
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